Lady Gaga y su prometido,
Taylor Kinney, quieren mantener los detalles de su boda en el máximo secreto
para poder sorprender al mundo cuando por fin revelen que se han convertido en
marido y mujer.
“¡Vamos a hacer que sea una
sorpresa!”, aseguró Taylor a la revista People.
Taylor, que propuso
matrimonio a la artista el Día de San Valentín de 2015, se ha convertido en el
mayor apoyo de Gaga desde que comenzaron su relación en 2011.
“No presiono, no empujo. No
pregunto. Si ella quiera compartir algo personal, lo hace por sí misma”, añadió
Kinney.
Uno de los pocos detalles
sobre su enlace que ha compartido el galán ha sido cuál podría ser una de las
localizaciones, Marruecos, un país del que se enamoró mientras rodaba la
película “Rock the Kasbah".
“¡Marruecos sería genial! Le
dije que no me importaba casarme en una de esas pequeñas capillas blancas. Ella
sabe lo que quiere. Quiero asegurarme de que sea justo lo que obtiene”, explicó
el actor.
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